Por Juan David Correa Carmona
Dirección de Inclusión Financiera de Bancolombia
En San Carlos, municipio rural a cuatro horas de Medellín, impulsamos las transacciones electrónicas a través de Ahorro a la Mano, aplicación con la que Bancolombia apoya los procesos de bancarización y los objetivos de inclusión financiera en Colombia.
En el marco de un proyecto liderado por la Dirección de Inclusión Financiera y cofinanciado por el programa Banca de las Oportunidades del Gobierno Nacional, con el que se creó Ahorro a la Mano, desarrollamos un piloto en el municipio de San Carlos, en el que probamos de manera controlada las diferentes funcionalidades de la aplicación antes de lanzarla al mercado.
Como parte de este piloto, se realizó en días pasados una jornada de pagos en el parque principal del municipio. En ella se le enseñó a la comunidad a realizar el pago de sus facturas desde el celular por medio de la aplicación, y por dos días nos convertimos en la tesorería de la empresa de servicios públicos y de la Alcaldía Municipal, pues los sancarlitanos por primera vez pagaron los servicios públicos y sus impuestos de manera digital, viviendo los beneficios que traen la tecnología y la innovación.
La aplicación, además de ayudar a disminuir el uso de efectivo en el país, espera ser una solución para esos habitantes de las zonas rurales colombianas que, como los sancarlitanos, ya no se tendrán que desplazar hasta los cascos urbanos para realizar el pago de sus facturas, sino que lo podrán hacer desde sus celulares, de una manera rápida y sin costos.
San Carlos fue seleccionado por ser un rincón del país con una historia de resiliencia y esperanza que vale la pena contar: después de haber vivido 33 masacres y ser conocido por tener una de las cifras de desplazamiento más altas de Colombia, con cerca de 20.000 desplazados, se convirtió en ejemplo de arraigo y lideró los procesos de retorno en el país.
Por esta razón, el municipio fue priorizado por el Gobierno Nacional y Bancolombia para probar los beneficios que pueden traer las innovaciones en los servicios financieros y facilitar el acercamiento del sistema financiero a las personas de las zonas rurales y alejadas de Colombia.
El proyecto, el piloto y la jornada de pagos nos permitió confirmar que como grupo financiero es posible lograr un beneficio económico, alcanzando al mismo tiempo un beneficio social.
Fotos: Bancolombia